Crónica de Pedro Enrique Hernaiz
Prometí a mi
gran amigo, Miguel Ángel y mi escudero
de carreras, Alfonso, que si conseguíamos una silla de ruedas para Miguel,
gracias a los donativos de todas esas personas que nos han apoyado en nuestras
carreras, subiría corriendo el puerto mas duro de Europa, el temido L'angliru,
12'5km de cuestas de hasta un 23'5%, las promesas hay que cumplirlas, pero
cuando conseguimos el dinero para la silla en Junio del año pasado(2011), me
empezaron los sudores y pesadillas todas las noches solo de pensarlo, la
carrera fue el 11 de septiembre del 2011, no dormía por las noches de pensar en ello, además había que subir sin
andar un solo paso en todo el recorrido, entrene durísimo con los
entrenamientos que me facilitaba mi amigo Salva, entrene en el
escorial, Navacerrada y abantos, llego agosto,
a un mes de la carrera y cuando mejor estaba físicamente, le dio a mi madre con
83 años un ictus que le afectó la parte derecha, ingresó en el hospital 12 de octubre,
y me vengo abajo, no pensaba ir a la carrera, pero me mando mi gran
amigo Kiko un correo, me decía que me acompañaría él, su hijo Roberto, nuestro amigo Enrique junto a su hijo Jorge a subir el l'angliru, me costó un poco de lucha con mi
familia pues no quería irme y dejar a mi madre con mi hermano, al final me
dieron mucho apoyo y nos presentamos el 10 de septiembre en Riosa a las faldas del L'angliru, corrimos, sufrimos, lloramos al entrar en meta, es lo mas duro que
he hecho hasta ahora, pero la mayor alegría fue al llegar a la meta llamar a mi madre
llorando.
-Mama he subido, he llegado.
- Muy bien
hijo, me dijo.
Gracias a
los que vinieron y siguen con migo. Os voy a contar lo que se dice del
l'angliru, se dice que es conocer el infierno subiendo hacia arriba, sales en
una pendiente de un 10% y sigues subiendo hasta la cueña les cabrales de un
23'5%, 12'5 km de subida de los 13'5Km, rompe las piernas, quieres retirarte y
piensas que hago yo aquí dios mio, pero aprietas los dientes y solamente
pensaba en mi madre y cumplir la promesa a Miguel, las promesas prueban los
limites del ser humano, cuando llegas tocas el cielo, solo quieres llorar y
llorar, por tantas cosas, son 15700m de los cuales 12550m son de pendiente, es
sin dudarlo lo mas duro que he hecho hasta ahora, lo hice con 53 años que es
otra dificultad, además, me gustaría, y se lo diré a mi familia y amigos ya desde hoy,
quisiera que mis cenizas al morir las esparcieras en lo alto del L' angliru,
gracias ,gracias y mil gracias a todos, son tantos que no pongo nombre os
quiero…
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